viernes, 11 de abril de 2008

DUCADO DE SCHLESWIG-HOLSTEIN

Nuestra actual reina se apellida Schleswig-Holstein. Por más que nos quieran decir que se llama de Grecia. Es como si a la dinastía reinante actualmente, se la hubiera llamado y se llamara aun hoy de Francia.

No. La dinastía reinante se llama de Borbón y la dinastía soberana del desaparecido reino de Grecia se llama Schleswig-Holstein. Nombre impronunciable donde los haya, todo sea dicho. ¿A quien se le ocurriría poner cuatro consonantes seguidas? Son cuatro, fíjese, improbable lector: S, C, H y L.

En cualquier caso, alguien decidió en su momento que la entonces princesa doña Sofía debía llamarse en estos reinos, de Grecia y a buen seguro existirán razones de peso que lo justifiquen.

En cualquier caso, como este blog es sobre heráldica, aunque últimamente parece más sobre eclesiología, entremos a nuestro tema: Schleswig-Holstein es el nombre de la dinastía reinante en Dinamarca. De esa familia partió un príncipe, en el reciente siglo diecinueve, para iniciar la monarquía en Grecia. En consecuencia, las dinastías de ambos reinos, son la misma.

La región que da nombre a estas dinastías ha pertenecido al reino de Dinamarca y también al imperio Prusiano-alemán. Sus armas son las que ya ha visto: Un partido del ducado de Schleswig, los dos leones de azur, rampantes leopardados y contornados, con el ducado de Holstein, el campo de plata con esa extrañísima bordura dantelada de gules.

La diestra de este partido, las armas del ducado de Schleswig, provienen de las armas adoptadas por la dinastía soberana del lugar, los propios Schleswig, en el momento de iniciarse el desarrollo heráldico. Los leones leopardados de azur en campo de oro, están contornados en el actual escudo por una extraña cortesía de ceder la cabeza y no otra parte del cuerpo a las armas del ducado vecino y con el que comparte el escudo: Holstein.

Estas armas del ducado de Schleswig, aparecen en las armas de la actual monarca danesa en el segundo cuartel, pero ya sin contornar: La siniestra del partido que estamos observando, el ducado de Holstein, a pesar de ser una representación simple ha dado lugar a ciertos equívocos:

El blasonamiento exacto es: En campo de plata bordura dantelada de gules. Creo que se dice dantelada, quiero expresar formando ángulos. Pues bien, los artistas han interpretado que la bordura dantelada representaba, atención improbable lector: Las tres heridas de los clavos de Cristo, e incluso ¡una hoja de ortiga!

Otro día hablaremos del escudo completo de la monarca danesa. Apostillo que los cuatro escudos expuestos con las armas del ducado de Schleswig-Holstein son todos diferentes en algún detalle. He leído en algún lugar que el gobierno de este ducado alemán no autoriza a empresas o particulares a usar las armas completas de la región, que quedan reservadas para los organismos institucionales. Pero autoriza a usar unas armas absolutamente similares a las oficiales. La diferencia estriba en la cola doble de los leones. Retroceda y compruébelo. Verdaderamente extravagante.